Las erupciones volcánicas de principios de este siglo han tenido un efecto suavizante en cuanto al efecto invernadero. A pesar de que los níveles de gases han aumentado en la atmósfera y elevarse el contenido total del calor en los océanos, las temperaturas medias globales de la superficie del planeta y de la troposfera han mostrado un nivel de calentamiento relativamente pequeño desde el año 1998.
Unos cientificos del Laboratorio Nacional Lawrence Livermore en Estados Unidos y de otras instituciones dentro y fuera del país han analizado la aportación de las erupciones volcánicas a este período de ralentización.
¿Qué es lo que aportan estas erupciones volcánicas a la atmósfera? Según los estudios realizados éstas aportan dióxido de azufre a la estratosfera (capa que está sobre la troposfera), este gas forma gotas diminutas de ácido sulfúrico que constituyen los llamados aerosoles volcánicos. Estas gotas reflejan una porción de la luz solar incidente, sacándola del balance energético del planeta y refrescando la superficie del planeta y loa capa baja de la atmósfera.
Entre 2000 y 2012 la emisión de gases dañinos a la atmósfera han aumentado, ésto hace que la troposfera se caliente y que la estratosfera se refresque, sin embargo las erupciones volcánicas hacen todo lo contrario, es decir refrescan la troposfera y calientan la estratosfera y por tanto está logrando que el calentamiento global esté pausado.